ALZHEIMER
Porqué la mayoría de los pacientes de Alzheimer son mujeres
Amy Shives, derecha, y su marido George caminar su Cavalier King Charles Spaniel Chester en su barrio, Miércoles, 03 de junio 2015, en Spokane, Washington. Amy Shives fue diagnosticado con la aparición temprana de la enfermedad de Alzheimer en 2011 y desde entonces ha estado involucrado con el Asociación de Alzheimer. (AP Photo / Young Kwak)
Casi dos tercios de los estadounidenses con la enfermedad de Alzheimer son mujeres, y ahora algunos científicos cuestionan la suposición de larga data que es sólo porque tienden a vivir más que los hombres.
¿Qué más puede poner mujer en riesgo adicional? ¿Podría ser la genética? Las diferencias biológicas en cómo envejecen las mujeres? Tal vez incluso el estilo de vida?
Averiguar podría afectar a los tratamientos o cuidados preventivos.
Una pista preocupante es que la investigación muestra un notorio gen relacionado con el Alzheimer tiene un mayor impacto en las mujeres que en los hombres.
"Hay cuestiones biológicas suficientes que apuntan a un mayor riesgo en las mujeres que tenemos que profundizar en eso y averiguar por qué", dijo María Carrillo, directora científica de la Asociación de Alzheimer.
El mes pasado, la asociación llevó 15 principales científicos en conjunto para pedir lo que se conoce sobre el riesgo de las mujeres. A finales de este verano, Carrillo dijo que planea comenzar a financiar la investigación para hacer frente a algunas de las lagunas.
"Hay mucho que no se entiende y no se conoce. Es hora de que hagamos algo al respecto", agregó.
Un reciente informe de la Asociación de Alzheimer estima que a los 65 años, las mujeres tienen una probabilidad de 1 en 6 de desarrollar la enfermedad de Alzheimer durante el resto de sus vidas, en comparación con una probabilidad de 1 en 11 para los hombres.
La parte difícil es determinar qué parte de la disparidad se debe a la longevidad de las mujeres o de otros factores.
"Es cierto que la edad es el mayor factor de riesgo para desarrollar la enfermedad de Alzheimer", dijo el profesor de la Universidad del Sur de California Roberto Díaz Brinton, que presentó datos sobre las diferencias de género en una reunión de los Institutos Nacionales de la Salud de este año.
Pero, dijo, "en promedio, las mujeres viven cuatro o cinco años más que los hombres, y sabemos que el Alzheimer es una enfermedad que comienza 20 años antes del diagnóstico." Eso es lo temprano puede empezar tranquilamente daño celular.
Brinton investiga si la menopausia puede ser un punto de inflexión que deja ciertas mujeres vulnerables.
Sin embargo, hay alguna evidencia de que una vez que la enfermedad de Alzheimer se diagnostica, las mujeres pueden empeorar más rápido; exploraciones muestran más rápida contracción de ciertas áreas del cerebro.
Pero la investigación de genes ofrece la evidencia más sorprendente de la diferencia sexual.
Investigadores de la Universidad de Stanford analizaron los registros de más de 8.000 personas para una forma de un gen llamado APOE-4, mucho se sabe que aumentan el riesgo de Alzheimer.
Las mujeres que llevan una copia de esa variante genética eran dos veces más propensos a desarrollar la enfermedad de Alzheimer con el tiempo que las mujeres sin el gen, mientras que el riesgo de los hombres se incrementó sólo ligeramente, de Stanford Dr. Michael Greicius informó el año pasado.
No está claro por qué. Puede ser en cómo el gen interactúa con estrógeno, dijo Brinton.
Amy Shives, 57 años, de Spokane, Washington, recuerda cuando su madre comenzó a mostrar síntomas de la enfermedad de Alzheimer. Pero no fue sino hasta después de su propio diagnóstico hace unos años que Shives miró las estadísticas de género.
"Eso fue alarmante", dijo Shives, que está en las primeras etapas de la enfermedad de Alzheimer, que azotaron a una edad más joven de lo habitual y obligó a su retiro como un consejero del colegio. "El impacto en nuestras vidas y la de nuestras familias es extraordinario".
Ella apunta a otra carga desproporcionada: Alrededor del 60 por ciento de los cuidadores de pacientes con Alzheimer son mujeres.
"Mis hijas están en sus 20 años y ya estoy enfermo," Shives preocupa. "Es muy estresante para que piensen en cuando su madre va a necesitar su ayuda."
Lo que impulsa la diferencia de los casos de Alzheimer no es clara, dijo la doctora Susan Resnick de los Institutos Nacionales de Salud, que apunta a la investigación en conflicto.
"Realmente hemos tenido un tiempo difícil entender si las mujeres realmente se ven más afectados por la enfermedad, o es sólo que viven más tiempo", dijo Resnick.
Los datos del Framingham, Massachusetts, estudio de salud de larga duración sugiere que debido a que más hombres mueren de enfermedades del corazón en la edad media, los que sobreviven pasado 65 pueden tener corazones más sanos que a su vez proporcionan cierta protección cerebral. Muchos de los mismos factores - la obesidad, el colesterol alto, la diabetes - que las arterias de daños también son riesgos de Alzheimer.
¿Qué pasa con las hormonas? Eso ha sido difícil de precisar. Hace años, un importante estudio encontró que la terapia de estrógeno después de los 65 podría aumentar el riesgo de demencia, aunque la investigación posterior mostró reemplazo hormonal en torno a la aparición de la menopausia no fue un problema.
Brinton estudia cómo la menopausia cambia el cerebro. El estrógeno ayuda a regular el metabolismo del cerebro, cómo se produce la energía para la función cognitiva adecuada, y debe cambiar a un método de respaldo menos eficiente como el estrógeno explicó.
"Es como si el cerebro es un poco diabético", dijo Brinton, que está estudiando la posibilidad de que puede relacionarse con síntomas de la menopausia en las mujeres que más tarde experimentan problemas cognitivos.
Carrillo señala que hace 40 años, las enfermedades del corazón se ha estudiado sobre todo en los hombres, con poca comprensión de cómo los riesgos del corazón de las mujeres pueden ser diferentes.
"¿Cómo nos aseguramos de que no estamos haciendo el mismo error cuando se trata de la enfermedad de Alzheimer?" ella pregunto.
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